Justificación
El tratamiento antitrombótico es fundamental en la prevención secundaria de los pacientes que padecen infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST (IAMCEST) y está basado en la evidencia científica de rigurosos estudios clínicos. Es necesario adecuar los tratamientos a las guías clínicas y a cada paciente para que no existan errores que puedan ocasionar mayor cantidad de complicaciones cardiovasculares y por tanto una mayor morbilidad y mortalidad.
Objetivos
El objetivo de este estudio es analizar el cumplimiento en nuestra área sanitaria de las recomendaciones en terapia antitrombótica de la Guía sobre el tratamiento de IAMCEST elaborada por la Sociedad Europea de Cardiología.
Metodología
El estudio se realizó sobre 96 pacientes (72 hombres y 24 mujeres) diagnosticados por primera vez de IAMCEST en nuestra área sanitaria entre 01/07/2018 al 30/09/2018.
Resultados
92 pacientes (95.83%) recibieron la doble terapia antiagregante recomendada: ácido acetilsalicílico + inhibidor del factor plaquetario P2Y12 (anti-P2Y12). Los 4 pacientes restantes (4.17%), tienen indicación para anticoagulación oral por lo que tienen prescrito acenocumarol + anti-P2Y12 que es lo recomendado en la Guía. Todos los pacientes tienen prescrito un anti-P2Y12: 61.46% clopidogrel, 38.54% ticagrelor y 0% prasugrel.
En cuanto a la posología de los tratamientos, ácido acetilsalicílico 100 mg/día y acenocumarol dosis según controles, ambos por tiempo indefinido; clopidogrel 75 mg/día y suspender tras 12 meses de tratamiento y ticagrelor 90 mg (34 pacientes) o 60 mg (3 pacientes) dos veces al día durante mínimo un año. Las recomendaciones de la Guía son en ácido acetilsalicílico y en los anticoagulantes orales como acenocumarol, que se mantengan en el tiempo si no existe contraindicación expresa; que clopidogrel no ha proporcionado ningún beneficio alargando su tratamiento durante más de 1 año y si efectos adversos como mayor riesgo de hemorragias y que ticagrelor ha demostrado en diversos estudios una reducción de eventos cardiovasculares y de la mortalidad cardiovascular alargando el tratamiento hasta los 3 años.
Conclusiones
En este estudio llegamos a la conclusión que las recomendaciones de la Guía se cumplen a la perfección, tanto en elección de los principios activos como en la dosis y duración de los mismos.