JUSTIFICACIÓN: la farmacia comunitaria (FC) se enfrenta a diario con situaciones que impiden la dispensación adecuada del medicamento y que están relacionadas con la forma farmacéutica, el tamaño del envase, la idoneidad de una presentación determinada, el extravío de la medicación por parte del paciente, etc. en las que el farmacéutico se ve obligado a derivar al médico de Atención Primaria (AP) debido a que su intervención, si hiciera esa dispensación, superaría sus competencias profesionales.
OBJETIVOS: estimar el número de incidencias que impiden dispensar el fármaco adecuado y que podrían ser susceptibles de resolución por parte del farmacéutico comunitario, pero que por la normativa actual precisan obligatoriamente de la intervención del médico prescriptor.
Material y Métodos se han clasificado las FC en función del número de habitantes que contiene la localidad en la que se encuentran, y son:-Urbana: más de 50.000-Semiurbana: entre 5.000-50.000 -Rural: menos de 5000 Se ha registrado mediante un cuestionario alojado en una plataforma web, aquellas incidencias detectadas según los FR, en horario habitual de la farmacia, durante el periodo del 8-21 noviembre 2021, en FC de Aragón y Asturias. Para calcular el tamaño muestral se partió de los resultados del piloto realizado en Asturias en octubre de 2020.
RESULTADOS: una vez depurada la base de datos se incorporaron al estudio 138.697 dispensaciones, correspondientes a 87 FC, que cumplimentaron adecuadamente los registros. Un 44,37 % proceden de farmacias urbanas, 39,94 % farmacias semiurbanas y 15,69 % rurales.
CONCLUSIONES: en FC rurales se produce un menor número de dispensaciones debido a la menor población a la que tienen acceso. Aún así, la farmacia rural mostró una mayor tasa de incidencias, presentando diferencias significativas con la farmacia rural y urbana. Así vemos que la farmacia rural, si la legislación lo permitiera, podría enmendar un número significativo de incidencias y factores de riesgo, que pueden conllevar a un empeoramiento del estado de salud del paciente, por una interrupción del tratamiento e incluso aumentar la falta de adherencia al mismo. Además, los pacientes son, según los resultados del estudio, mayores de 65 años, polimedicados y con medicación crónica, con lo que mejorar su estado de salud y su adherencia al tratamiento, es de vital importancia.