INTRODUCCIÓN Y JUSTIFICACIÓN: la mayoría de problemas de salud requieren la estrecha colaboración entre los distintos profesionales sanitarios implicados. Existe evidencia de que la actuación conjunta médico-farmacéutico, en patologías como la hipertensión, mejora el control de la misma. En los problemas de seguridad de fármacos, la polimedicación supone un riesgo añadido, por la posibilidad de aparición de RAM (reacciones adversas a medicamentos) y/o interacciones clínicamente significativas, así como también por el difícil ajuste de horarios/dosis.
PRESENTACIÓN DEL CASO: varón de 81 años en tratamiento con:
-AAS 300 mg: 0-1-0
-Amlodipino 5 mg: 0-1-0
-Atorvastatina 20 mg: 0-0-1
-Enalapril 20 mg: 1-0-0
-Dutasterida 0,5 mg/hidrocloruro de tamsulosina 0,4 mg: 0-0-1
-Sitagliptina 50 mg: 1-0-1
-Nolotil 575 mg: 1-1-1
-Cloruro de potasio 600 mg: 1c/2 días-Furosemida 40 mg: 1-0-0
-Succinato de Solifenacina: 1-0-0
-Alopurinol 300: 1-0-0
Acude a la farmacia tambaleándose, mareado. La medida aislada de presión arterial indica 35 pulsaciones/minuto.
INTERVENCIÓN: ante la bradicardia que presenta, se llama a una ambulancia insistiendo en la urgencia. Durante la espera se revisa el tratamiento y se habla con el paciente a fin de determinar si es un posible PRM (problema relacionado con medicamentos). El último medicamento pautado es amlodipino, que tiene descrita como reacción adversa muy rara bradicardia. Llega la ambulancia y se advierte a la doctora varias veces que tenga en cuenta el amlodipino en su intervención. En el hospital se le pone al paciente un marcapasos, y vuelve en unos días. No se encuentra bien, y las medidas de presión arterial indican hipotensión: PAS/PAD Pul 99/53-63 pulsaciones/minuto y PAS/PAD Pul 94/51-65 pulsaciones/minuto. Según aparece en su receta y nos confirma el paciente, sigue en tratamiento con amlodipino. Hablamos con su médico de cabecera y se lo retira. Vuelve el paciente en unos días y se observan valores de tensión irregulares a lo largo del día. Tras revisar de nuevo el caso y hablar con el paciente acerca de las horas en que toma Enalapril y amlodipino, así como de la dosis actual, se decide remitir al médico con un informe de derivación: -Se le oferta controlar presión arterial según metodología impacHta y hacerle una MAPA. Se le informa de la posibilidad de dar la mitad de dosis de amlodipino (muchas reacciones adversas son dosis-dependientes). Se le ofrece nuestra colaboración en lo que sea necesario. Actualmente derivado a SPF de seguimiento. El médico le dice al paciente que no cambie de farmacia.
DISCUSIÓN y CONCLUSIONES: la mejora de la comunicación médico-farmacéutico aumenta la confianza y el compromiso del paciente en el sistema sanitario. En un principio el paciente no quería ir al hospital, ni quería que desde la farmacia contactáramos con su médico. Al hacerle ver que esa comunicación al que realmente beneficia es a él como paciente, a día de hoy está encantado y no ha dudado en proporcionarnos toda la información necesaria para la presentación del caso.