JUSTIFICACIÓN: la proliferación de la COVID-19 ha generado una crisis de salud pública, en la que los farmacéuticos comunitarios (FC) han tenido que adaptar y reforzar algunas de sus funciones para dar una respuesta eficaz a las necesidades sanitarias del paciente.
OBJETIVOS:
• Protocolizar las nuevas funciones a desarrollar durante la pandemia.
• Describir y cuantificar cada uno de los nuevos servicios.
MATERIAL Y MÉTODOS:
• Dispensación domiciliaria (DD). Este servicio ha sido destinado a pacientes exclusivamente sin posibilidad de apoyo de otras personas de su entorno.
• Renovación de tratamientos. Se puso en marcha con la colaboración del centro de salud (CS) y farmacias comunitarias de la zona. A medida que a los pacientes se le agotaban los tratamientos de su receta electrónica, se comunicaba a su médico este hecho a través de email.
• Dispensación excepcional de medicamentos hospitalarios (MDH). Se realizaba a través del aplicativo Portalfarma del Colegio de Sevilla y con la ayuda de Bidafarma para su distribución.
• Procedimiento excepcional de dispensación de Hidroxicloroquina. Se pone en marcha con la organización colegial para asegurar el abastecimiento a pacientes con las indicaciones que venían recogidas en la ficha técnica, tras las publicaciones realizadas para su uso en la COVID-19.
RESULTADOS: durante el estado de alarma que ocasionó la COVID-19 se realizaron 21 dispensaciones con entregas domiciliarias, de las cuales el 61 % llevó aparejado la elaboración de SPD Se efectuaron cinco dispensaciones de medicamentos hospitalarios a 3 pacientes. Se dispensaron 14 Hidroxicloroquina para 8 pacientes.
CONCLUSIONES: durante los tres meses del estado de alarma decretado por el gobierno se ha venido desempeñando funciones esenciales. Algunas ya eran realidad, como la resolución de síntomas menores mediante la indicación farmacéutica, tomando mayor relevancia en respuesta al cierre de los CS, consejo farmacéutico (especialmente asociado a la COVID-19), el acceso a los tratamientos… Y otras, que se venían reivindicando históricamente. La DD durante el confinamiento ha sido una herramienta útil. Es por ello necesario que las administraciones sanitarias realicen las modificaciones legales adecuadas para una puesta en funcionamiento la atención farmacéutica domiciliaria. La dispensación de medicamentos hospitalarios en las FC ha permitido a nuestros pacientes acceder a estos evitando desplazamientos innecesarios ya que además han recibido una atención farmacéutica adecuada. El FC juega un papel importante con su actuación coordinada con las estructuras asistenciales de los Servicios de Salud para garantizar el abastecimiento de los medicamentos.