OBJETIVO: evaluar grado de uso y valoración del SPD de farmacéuticos; analizar grado de conocimiento y valoración del SPD de médicos y enfermeros/as; estudiar actitudes y creencias de pacientes que usan SPD.
MATERIALES Y MÉTODOS:
• Estudio mixto en Baix Llobregat.
• Parte cuantitativa: se diseñaron cuestionarios para farmacéuticos y médicos.
• Parte cualitativa: se realizaron entrevistas a pacientes del Prat de Llobregat.
• Población: usuarios del SPD: mayores de 65 años, que utilizaran tres o más medicamentos sólidos orales; antigüedad del SPD igual mayor a un mes.
RESULTADOS: Farmacéuticos: el 100 por ciento que ofrecía el servicio recomiendaban su uso. Todos lo recomendaban cuando había sospecha de que el paciente no tomaba correctamente la medicación. El farmacéutico y el médico eran los que más le sugerían el uso del SPD. El 84,6 por ciento notó mejoría en sus pacientes, por haber disminuido las visitas al Centro de Atención Primaria (CAP) y por la ausencia de problemas relacionados con la medicación (PRM). El 100 por ciento creía que sin evidencia, el SPD mejoraba la salud del paciente, porque mejoraba la dosificación. Las ventajas: aumento de seguridad y seguimiento farmacoterapéutico y mayor comodidad. Las desventajas: no se pueden emblistar todas las presentaciones y coste económico elevado. El 46, 2 por ciento daba una valoración buena, el 53,8 por ciento muy buena. Médicos: el 72,4 por ciento conocía el SPD. Todos los que lo conocían recomendaban su uso, el 75 por ciento lo recomendaban cuando hay sospecha de que no lo estaban tomando correctamente. Un 70 por ciento notaba mejoría en sus pacientes porque éste lo comentaba y por disminución de visitas al CAP. El 90 por ciento consideraba que sin evidencia, el SPD mejoraba la salud de los pacientes porque mejoraba el cumplimiento. Las ventajas: mejora adherencia y correcta toma de medicamentos. Las desventajas: cambios en la medicación frecuentes y comunicación OF-médico. El 60 por ciento de los encuestados dio una valoración muy buena, el 31 por ciento buena. Pacientes: los que manejaban bien la medicación antes del SPD, tomaban pocos medicamentos o consideraban importante su tratamiento. Otros tenían dificultades por falta de memoria o por el cambio de las marcas. Empezaban a usar el servicio porque se lo comentaron en la farmacia, el médico o el propio paciente lo demandaba. La mayoría se sintieron bien con el servicio. Todos consideraban muy útil el servicio. Los motivos: método de recuerdo, tranquilidad y comodidad.
CONCLUSIONES: el SPD mejora la salud del paciente indirectamente, aumento de la adherencia al tratamiento y, directamente, disminución de PRM, entre otros.