INTRODUCCIÓN: la pandemia por la COVID-19 provocó que la población acudiera en primer lugar a la farmacia comunitaria. Debido a la limitación de movilidad y a que la farmacia es la puerta de entrada al sistema sanitario, la comunicación entre farmacéuticos y otros profesionales sanitarios, principalmente de los centros de salud, se hizo más importante que nunca. En nuestra comunidad autónoma se renovaron automáticamente todas las prescripciones que caducaron pero no se hizo efectivo en todos los supuestos. Además, desde la farmacia coordinamos un sistema de registro de notas informativas en receta electrónica para que los profesionales sanitarios pudieran tener más información sobre las incidencias detectadas en la farmacia.
OBJETIVOS:
• Cuantificar cuantas incidencias relativas a receta electrónica (RELE) se gestionaron y resolvieron desde la farmacia desde el 14 de marzo hasta el inicio de la fase 1 (10 de mayo).
• Evaluar el tipo de incidencias resueltas y la edad de los pacientes.
MATERIAL Y MÉTODOS: se registraron todas las incidencias gestionadas por parte de los farmacéuticos de la farmacia en una plantilla donde se recogió sexo, año de nacimiento, motivo de incidencia, inserción de la nota en RELE y su resolución. El tratamiento de datos se hizo con Excel.
RESULTADOS: se gestionó un total de 116 incidencias. Un 56,9 % eran mujeres y un 43,1 % hombres. Un 52,2 % de los pacientes a los que se gestionó la incidencia tenían 70 años o más. El motivo de la incidencia en el 73,3 % de los casos era para renovar la medicación, un 6,0 % pauta posológica prescrita diferente a la usada por el paciente, un 5,2 % medicamento finalizado, pero problema de salud no resuelto o reaparecido, un 4,3 % modificación de forma farmacéutica por desabastecimiento, un 2,6 % utilización errónea de la medicación, un 1,6 % activación de nuevo de fármacos racionados por COVID-19 (hidroxicloroquina) y un 6,9 % por motivos diferentes a los anteriores. Se insertó una nota informativa en RELE en el 58,6 % de los casos.
CONCLUSIONES: la farmacia comunitaria ha demostrado ser eficaz en la resolución de incidencias y debería potenciarse su trabajo, sobre todo en incidencias relacionadas con el uso adecuado de la medicación, así como evitar desplazamientos innecesarios. De aquí la importancia de establecer una comunicación entre el farmacéutico comunitario y demás profesionales sanitarios mediante vías de comunicación ágiles y efectivas de manera estructurada.