Justificación
La enfermedad renal crónica (ERC) es un problema de salud que aumenta con la edad. Es de difícil tratamiento por tanto es fundamental cuidar el riñón eliminando los posibles tóxicos. Algunos medicamentos de uso frecuente pueden ser nefrotóxicos por tanto es importante localizarlos y, en la medida de lo posible, eliminarlos. Otros medicamentos, que se eliminan por vía renal, necesitan un ajuste de dosis en relación al Filtrado glomerular estimado (FGe) para no alcanzar niveles tóxicos.
Objetivos
Detectar pacientes con FGe≤60 ml/minuto/1,73m2 que estén tomando medicamentos nefrotóxicos o medicamentos que necesiten ajuste de dosis.
Derivar a estos pacientes al médico de atención primaria (MAP) para que los evalúe.
Metodología
Criterios de inclusión: pacientes que acuden a la farmacia comunitaria, mayores de 60 años, que utilizan al menos un medicamento antidiabético, antihipertensivo, hipolipemiante, implicado en el tratamiento de enfermedades obstructivas del tracto urinario, nefrotóxico.
Si aceptan participar se les pregunta si disponen de un análisis de creatinina reciente. Si no es así se les determina la creatinina por punción capilar con el analizador, previamente validado para este estudio, StatSensorXpress®. Se calcula el FGe mediante la fórmula CKD-Epi.
Si FGe≤60, se estudia la farmacoterapia del paciente buscando medicamentos objeto del estudio. Si necesitaran ajuste de dosis o retirada, se remite al MAP para su estudio.
Resultados
Participan 4 farmacias que reclutan 198 pacientes con edad promedio 72,3 años. 49,5% hombres.
111 (56,1%) tienen FGe>60, 57 (28,8%) FGe 60-45, 25 (12,6%) FGe 45-30, y 5 (2,5%) FGe<30.
Los 87 (43,9%) pacientes con FGe≤60 toman 638 medicamentos de los cuales se deriva al MAP solicitando la retirada de 20 (3,4%) y el ajuste de dosis de 33 (5,2%).
El MAP retira 8 (40%) medicamentos y ajusta la dosis de 7(21%).En total se modifican 15 medicamentos lo que supone un 27,3% de las solicitudes, y un 2,4% del total de los medicamentos que tomaban estos pacientes.
Conclusiones
El programa parece funcionar bien, pero se echa de menos una mayor comunicación entre farmacéutico comunitario y MAP. Con más comunicación probablemente habríamos evitado alguna derivación innecesaria y el MAP habría recibido mejor nuestras aportaciones.